Para enseñar bien en inglés hay que tener un gran dominio del
idioma. Sobre esa premisa la Consejería de Educación estudia elevar el nivel
mínimo exigido para impartir asignaturas dentro de las secciones bilingües del
intermedio alto (B2) que se requiere ahora al avanzado, también conocido como
C1 dentro de la escala europea de referencia para la evaluación de lenguas.
Se trata de una de las medidas que están ahora sobre la mesa
dentro de lo que será una «profunda» revisión del modelo de bilingüismo en el que
trabaja la Dirección General de Políticas Educativas y cuya evaluación podría
estar lista antes de que termine este curso aunque la aplicación de las
novedades se iría realizando de forma progresiva.
La Consejería de Educación ha trasladado que se trata de
una medida que no tendría una aplicación inmediata. «Cambiaremos las reglas
primero y luego veremos cómo lo aplicaremos», apuntó el consejero Fernando Rey
durante una reciente comparecencia en las Cortes tras una pregunta del grupo
socialista sobre esta cuestión.
Formación. En todo caso, la medida
formaría parte de ese proceso de revisión total de la política de bilingüismo e
idiomática de Castilla y León. Ya en la presentación de su programa de
legislatura insistió en la necesidad de «reforzar al máximo la formación
específica del profesorado. Nos planteamos una mejora de los itinerarios y
modelos formativos para los diferentes perfiles», indicó.
Por su parte, la presidenta del Sector Autónomo de Enseñanza de
CSIF, Isabel Madruga, considera que la medida que está sobre la mesa implicaría
que hubiera un tiempo transitorio de adaptación para conseguir las
acreditaciones de los niveles más altos.
En la actualidad, más de 7.000 docentes de la Comunidad,
entre maestros y profesores de enseñanzas medidas y Formación Profesional, han
alcanzado la acreditación lingüística obligatoria para impartir docencia en los
cerca de 500 centros bilingües de la Comunidad desde su puesta en marcha en el
año 2009.
El número de acreditaciones no tiene por qué
corresponderse con docentes ya que un mismo profesor puede obtener la
acreditación para varios idiomas. De este modo, desde que se puso en marcha
esta acreditación en el año 2009, en virtud de la puesta en marcha dos años
antes de los centros bilingües en la Comunidad, se han solicitado 10.531
acreditaciones, de las que se concedieron el 69 por ciento, hasta las 7.267, de
las cuales 4.966 se concedieron al cuerpo de Maestros y 2.301 al de Profesores
de enseñanzas medias y FP.
La Consejería de Educación saca una convocatoria anual
para obtener la acreditación entre los meses de octubre y noviembre y que se
resuelve entre los meses de febrero y marzo, poco antes de que tenga lugar el
concurso de traslados para que los docentes que lo deseen puedan optar a una
plaza en un centro bilingüe. Una vez que se alcanza esa acreditación, explicó,
el docente lo tiene para siempre, según informa Ical.
Dentro de la revisión del modelo de bilingüismo la
consejería también baraja la posibilidad de incrementar significativamente el
número de colaboradores internacionales y la acreditación competencial de los
alumnos que finalizan la Educación Secundaria Obligatoria. Entre las posibles opciones,
estudia llevar a cabo una prueba externa específica vinculada a las Escuelas
Oficiales de Idiomas.